El Bullying

Tanto si tu hijo está siendo objeto de agresiones en el centro escolar como si simplemente quieres prevenir, ayudándole a estar preparado para estas situaciones, hay una serie de cosas que puedes decirle:

• “Ignora al acosador”: El niño no debe seguirle la corriente a quien está intentando humillarle y burlarse de él. El acosador busca hacer daño, ver que su víctima se enfada o llora es para él un premio. Si las agresiones no son físicas, lo mejor que se puede hacer es pasar de largo e ignorarle.
• “Tú no eres el problema”: El niño debe entender que es el acosador la causa del problema y que él no es culpable de lo que le está pasando.
• “Mantente firme ante el acosador”: Si el acosador toca físicamente a tu hijo (ya sea agarrándole o empujándole) o toca sus cosas, el niño deberá mantenerse firme y demostrar que no tiene miedo. Debe intentar parecer tranquilo y firme y decirle seriamente al acosador que no le moleste.
• “No llores ni te enfades”: Como hemos dicho, eso es precisamente lo que busca el acosador, por lo que, si lo consigue, ya no querrá soltar a su presa. Intenta que tu hijo controle sus sentimientos. Podéis ensayar en casa, imaginando, por ejemplo, que está dentro de una esfera de cristal en la que nada puede dañarle. El niño debe entender que no llorar delante del acosador no significa que no pueda expresar sus sentimientos. Muéstrate dispuesto a escucharle siempre que lo necesite y hazle comprender que siempre estarás con él si necesita desahogarse.
• “Habla con un adulto”: Explícale que, si tiene este tipo de problemas, es indispensable que hable con un adulto, ya seáis vosotros, un profesor, el psicólogo del colegio… El niño debe entender que contar lo que le están haciendo no lo convierte en un chivato y que, si no pide ayuda, la situación puede ir volviéndose cada vez más grave.